sábado, 25 de julio de 2009

IdD: Más vale pájaro en mano que cien volando

“Que se prohíban las armas”, “que haya paz y felicidad en todo el mundo” son frases que no son sólo dignas de una candidata a Miss Mundo o de la canción “Imagine” de John Lennon, sino que también son usadas por muchos políticos. Éstos saben que suenan bien y que mucha gente de buenas intenciones con poca experiencia en la vida se las tomará en serio.

Esas frases son fantásticas, y ojalá que pudieran llegar a cumplirse. Lamentablemente son irrealizables por su idealismo. ¿Qué se le va a hacer? No se puede construir una sociedad basándose en ellas. En efecto, cuando gobernantes han usado frases similares para edificar naciones sólo se han logrado construir realidades contrarias a las frases inspiradoras, transformando esas sociedades en realidades infernales. Basta ver lo que logró el socialismo marxista y lo que está logrando el socialismo del siglo XXI.

No se pueden construir sociedades sobre castillos de arena. Por eso el genio de un buen político consistirá en saber utilizar la verdadera naturaleza humana y encaminar a sus conciudadanos hacia lo mejor que se puede alcanzar acá en la tierra... que nunca será lo óptimo, ya que lo perfecto es enemigo de bueno. El político realista no tratará de “acabar con el lucro”, ya que se dará cuenta de lo que decía Adam Smith: “no es de la benevolencia del carnicero, el cervecero o el panadero de lo que esperamos nuestra cena, sino de sus miras al interés propio, y nunca les hablamos de nuestras necesidades sino de sus ventajas”. Lo importante es tratar de encauzar la natural soberbia, avaricia y gula, a que se transformen en un adecuado sentido del honor, en un eficiente sistema económico y en una rica cultura culinaria.

Dejemos el idealismo para que inspire el actuar personal.

domingo, 19 de julio de 2009

IdD: Libertad, Igualdad... orden

Al definir a la derecha y la izquierda muchas veces se recurre a los conceptos de igualdad, libertad y orden. Generalmente se dice que la izquierda valora la igualdad por sobre la libertad, y que la derecha preferiría la segunda por sobre la primera, pero poniendo al “orden” por sobre las otras dos*.


La posición clásica de la derecha se puede ejemplificar con el actuar de una profesora: A ella le encantaría que sus alumnos fuesen igualmente brillantes, y pone sus mejores esfuerzos por que todos aprendan (igualdad). No obstante eso, siempre habrá un Pedro Flojo y un Juan Esfuerzo, y el deseo por la igualdad nunca llevará a la profesora a ser injusta e impedir que los más empeñosos exploten al máximo sus capacidades. Por eso no se contentará con enseñarle a todos a sumar (en lo que Pedro y Juan se sacan las mismas notas), sino que también les enseñará a dividir, aunque ello signifique que el empeño de Juanito le sobresalir (libertad). La actitud de la profesora no sólo beneficia al niñito Esfuerzo, sino que incentiva a Flojo a dar lo mejor de sí, o a darse cuenta de que lo suyo es la poesía.


Sin embargo, esta relación entre igualdad y libertad no puede ni siquiera plantearse en un curso en el que los alumnos están constantemente tirándose cáscaras de naranja, molestando al gordito del curso o jugando al hombre colgado. El orden es una condición previa, tanto para la libertad como para la igualdad, y los profesores lo saben.
El que la derecha tiene una atracción por la igualdad, pero ama aún más la libertad y sujeta ambas al orden, ha sido rebatida por algunos. Uno de ellos es un personaje** que dice que la derecha sólo quiere libertad en materia económica y no social, pero no es así. Él se basa principalmente en que la derecha no apoya, p.ej., el aborto, pero eso es sencillamente porque el primer requisito de la libertad es el mantenerse vivo. Hay otras banderas de lucha que pueden parecer contrarias a la libertad, pero sólo buscan evitar los efectos perversos que esas acciones pueden tener en la vida social, las que restringen aún más la libertad al largo plazo.

En efecto, en general la derecha no se preocupa de si una persona fuma o no, o si come o no balanceadamente (banderas de lucha de la izquierda). En cambio es la derecha la que está a favor de la mayoría de las libertades sociales: de educación (promoviendo los colegios subvencionados), de asociación (privilegiando leyes liberales para la concesión de personalidad jurídica), de expresión (votando en contra de leyes que busquen fijar la historia por ley), etc.

Llama la atención por qué, si los maestros actúan siguiendo modelos que generalmente se atribuyen a la derecha, el Colegio de Profesores está gobernado por comunistas.

* Ej. Maritain en The peasant of the Garonne y Lettre sur l’Independance.
** Dworkin.

martes, 14 de julio de 2009

PDD: Más claro echarle agua.

Acá les dejo un video que explica con peras y manzanas el efecto de la Píldora del Día Después.



Como ya terminé los exámenes, este domingo espero mandarles un posteo más largo.