Para aquellos que dicen: “no sean exagerados, mientras más grande el Estado, más bien puede hacer”, les recordaré que también puede hacer mucho mal, por lo que convendría que el poder se le diera a las agrupaciones intermedias (el Fisco puede dar subsidios en los casos en que sea necesario). Para dar algunos ejemplos recientes de bienes afectados por estos Estados grandes:
1) La vida: matanzas del socialismo marxista en tantos países, y del nacional socialismo en Alemania.
2) La supervivencia: al controlar la economía han traído la escasez de alimentos, como sucede hoy en Cuba, o como sucedió en Chile el 73.
3) Las conciencias: condena de presidio al pastor protestante sueco Ake Green por decir en un sermón que el “matrimonio” homosexual era contrario a los valores cristianos (FUE POSTERIORMENTE ABSUELTO POR LA CORTE SUPREMA); o la condena de cárcel que el 2006 se dio a David Irving por negar el holocausto (un grave error, pero que no ofende directamente ni a una persona ni a un grupo determinado, ¿dónde queda la libertad de expresión?).
A pesar de que muchos sean absolutistas, la historia está a favor de nosotros los autonomistas.